El nuevo tándem GIN Fuse reemplaza al Safari para el vuelo libre. Viene con un diseño completamente renovado que se basa en la vela EN B avanzada de GIN, la Carrera. El Fuse tiene 49 cajones y 5,35 puntos de alargamiento. Su planta exhibe mucha personalidad, destacando unos estabilos grandes, rectos y ligeramente retrasados. Es un biplaza elegante con inflado ligero, fácil de volar, confort y con un rendimiento que emerge con facilidad.
GIN ofrece la Fuse en dos tallas muy amplias: la de 37m2 para un rango de 95-175 kg en vuelo, y la de 41m2 que va de los 110 hasta los 220kg. Yo probé la talla grande con 170 kg de carga total en vuelo. Por el comportamiento y el rendimiento general que me ofreció, creo que es la talla más interesante para los pilotos sobre 90 Kgs
Inflado ligero
El Fuse presenta un borde de ataque perfectamente preformado y con unos “buenos” cajones, lo que hace que infle a la menor brisa. Por este motivo funciona muy bien en despegues sin viento. La vela sube al mínimo impulso y de hecho tendremos que correr con suavidad o anticiparnos y sujetarla.
En condiciones de brisa y viento normales se controla bien, pero cuando el viento supera los 20 – 25 km/h esta virtud hace que tienda a salir disparada, por lo que deberemos emplear alguna técnica más específica para que la vela no suba de golpe, por ejemplo dejarla en “coliflor” y hacerla subir sólo con las líneas centrales, así la vela infla de forma gradual con menos ímpetu. Otra fórmula que funciona bien es el inflado cobra.
El caso es que con viento fuerte la Fuse pide mano experimentada.
El Rolls Royce de los biplazas
En vuelo el Fuse se siente majestuoso, ofrece consistencia, definición en el rumbo y mando preciso, los grandes estabilos parecen inflados a presión y la sensación a los mandos es estupenda, transmite confort y seguridad.
Sólida y maniobrable
De la turbulencia solo te llegan los “ecos”. La Fuse se va comiendo los meneos y el piloto recibe un mensaje tranquilizador de la vela: “relájate y ocúpate de centrar los núcleos, de la turbulencia me ocupo yo…”
Y no por ello el pilotaje pierde chispa o atractivo, para nada: el mando es óptimo, con unos 30 cm de recorrido útil, dureza media y tacto perfectamente progresivo para desarrollar un pilotaje preciso y efectivo.
Además, el Fuse ofrece buen control en todos sus ejes, con un vuelo limpio y giros coordinados. El control de la velocidad es bueno y gracias a ello resulta fácil redondear los aterrizajes.
Flotadora
El Fuse transmite bien, gira de forma eficiente y ofrece un rendimiento óptimo en tasa de caída, es de esos parapentes que te hacen sentir que flotas. Los planeos son eficientes, la vela mantiene el rumbo y apenas se inmuta con la turbulencia. El trimmer ofrece un buen margen para variar las velocidades, algo que los pilotos más técnicos y deportivos sabrán utilizar para exprimir el rendimiento al máximo.
Maniobras
Este parapente es capaz de encadenar bien giros y wingovers, aunque su espíritu es mas bien tranquilo. Para entrar en barrena hay que apretar un poco a los mandos y tras una vuelta la vela se dispara bastante por lo que hay que controlar con precisión en la salida. En las dos barrenas que metí, hice la salida de forma más o menos gradual pero en ambas ocasiones me salió una buena trepada con “momento” final: cuando la vela llega a la cúspide de la trepada, pierde presión y te da un latigazo. Pude sujetar bien la vela, pero es un punto a tener en cuenta.
Seguramente con unos vuelos más le podría coger la mano para sacar la barrena con mayor suavidad.
Estética
La vela tiene un atractivo especial, más por su forma y diseño que por la propuesta visual, tanto en dibujo, que es el clásico de Gin, como las combinaciones a tres colores. Son bastante conservadores.
El Fuse básicamente ofrece dos combinaciones elegantes y otras dos más alegres: verde “curaçao” (que fue el que probamos), el amarillo “clover”, rojo “flamingo” y el naranja “tango”.
Trimmer y velocidades
Las bandas son de 22mm y robustas. Las A están divididas para meter orejas y señaladas en color rojo. El cierre del trimmer es enorme y funciona muy bien, permitiendo apretar con suavidad. La cinta del trimmer de 11 cm de recorrido se desplaza suavemente. Los puños de freno son grandes y suaves y cuentan con clip magnético marca de la casa.
Las velocidades oscilan alrededor de los 41 Km/h a manos libres, hasta los +/- de 46 Km/h de velocidad máxima con el trimmer totalmente suelto.
Construcción y acabados
En lo referente a la construcción todo lo de Gin está bastante bien, este es uno de los fabricantes que mejor experiencia de compra ofrece a sus fans: materiales solventes y probados para la vela como la tela Dominico 30 DMF (WR) 41g/m2 para el extradós y Dominico N20 DMF (WR) 35g/mA para intradós. Las costillas en Porcher Skytex 9017 E29A y Dominico N30 DFM 32g/m2. Toda la vela es un prodigio de refuerzos, costuras y detalles.
El ala cuenta con un llamativo morro de tiburón – Rigid Foil el EPT o Perfil aerodinámico optimizado con “Tecnología de Presión Equilibrada” para mejorar la estabilidad, la conducción y el rendimiento.
El suspentaje es todo con funda, Edelrid 7950 para las líneas superiores y Edelrid 7343 para el resto.
¿Para quién?
Un biplaza elegante y todo-terreno, con carácter y vuelo tranquilo, el Fuse ofrece planeo y un buen giro de rendimiento. Cualquier piloto con cierta experiencia podría volar sin problemas con él. Es una buena opción para los biplaceros profesionales, especialmente si haces despegues sin viento, pero si lo quieres utilizar regularmente en una zona ventosa vas a tener que contar con recursos en tu técnica de despegue.
Conclusión
El Fuse es un parapente biplaza EN B, sólido y de pilotaje asequible, con el nivel de seguridad que corresponde a su homologación, solidez, un gran nivel de confort, buenas prestaciones para el vuelo de rendimiento y el cross. La construcción y los acabados de GIN garantizan durabilidad y una buena experiencia a los profesionales y los biplaceros ocasionales.
+Info: gingliders.com
En España: Kasana.es
Parapente biplaza en Pedro Bernardo: Fotovuelo.com
