Acabamos de hacerle varios vuelos al Jedi 2, un parapente EN B de 5,7 puntos de alargamiento, de la marca francesa ITV, que ya tuvimos la oportunidad de probar hace un tiempo (Test ITV Jedi 2 parapente), aunque esta vez probamos su versión paramotor con bandas especiales para vuelo motorizado. Se trata de un parapente que tiene una personalidad polivalente, buen mando y estupendas características para un vuelo juguetón y también para el vuelo de rendimiento, ya que cuenta con buen giro y prestaciones notables para subir en térmica y planear.
ITV es una empresa con una larga historia en el vuelo libre, que en los últimos tiempos ha demostrado gran fuerza y renombre el mundo del paramotor también, así que no me extraña que un parapente de vuelo libre como éste mantenga características favorables para volar con motor.
En concreto, a este Jedi 2 color “sangría” con bandas de paramotor le hemos hecho cuatro vuelos. Todos agradables y divertidos.
El inflado es homogéneo, la vela sube pareja, gana presión y sube enseguida sin tendencia a adelantar. La carrera de despegue es corta y la sustentación llega desde una baja velocidad, así que resulta una parapente fácil para los novatos al motor.
Los trimmers, que son la principal novedad, son sencillos, están bien acabados y son muy robustos, ofreciendo una tranquilizante sensación de que no se van a romper jamás. Los mandos de frenos de ITV son grandes y acolchados, además de cómodos de sujetar incluso cuando llevas el acelerador del motor en la mano.
Trimmer positivo y negativo
Con estas bandas podemos frenar o acelerar la vela; esta característica es útil ya que en ocasiones queremos ir a toque de gas paseando a velocidad mínima y en este caso nos beneficia poder frenar la vela.
En otras ocasiones viene bien poder soltar un poco los trimmer para despegar, por ejemplo, en condiciones de viento cero.
Navegación, par motor y velocidades
Los trimmers te permiten ajustar el calado de la Jedi 2 para navegar con el calado óptimo. En general, conviene soltar siempre un par de centímetros para que la vela gane en penetración. Además también puedes ajustar los trimmer para compensar el par motor. Este sistema es el más simple de todos, no necesitas otros mandos alternativos así que resulta un parapente fácil de entender y pilotar. Los más novatos en el mundo del paramotor se sentirán cómodos enseguida.
A la hora de navegar, si soltamos todo el trimmer podemos pasar de los 40-41 hasta cerca de 48 kilómetros por hora. Y luego tenemos el pedal de acelerador, que ya lo habíamos probado en la versión de libre, el cual en este caso te permite sumar unos 7 kilómetros por hora. Así que entre trimmer y acelerador podemos llegar a una velocidad de unos 54-55 kilómetros por hora con buena sensación de rendimiento, planeo y velocidad.
Es un gran parapente para vuelo libre y paramotor, que ofrece despegue fácil, buena sustentación para volar a toque de gas y es muy fácil de entender y pilotar. El rango de velocidades no es muy alto pero es plenamente utilizable y transmite confianza al 100%.
Hay que resaltar que aunque es un EN B asequible también cuenta con espíritu freestyle.
Para este test volé con dos equipos diferentes. Por un lado utilice el nuevo paramotor “Drone” de Airfer equipado con un motor Corsair Black Devil Light de 172 cm con hélice Helix de 130cm.
Además pude volarlo con el Airfer Mustang Mini, un paratrike mono-biplaza, cargando un total de casi 190 kg en vuelo. El Polini Thor 250 con hélice de 150cm funcionaba absolutamente relajado.